El Pleno de la Corporación, con los votos favorables de PSE y PP y la abstención del resto, aprobó en su sesión de esta semana la primera modificación para el presupuesto de 2013. Se trata de una adición ligeramente superior a 1,6 millones de euros que se financia con los remananentes del pasado ejercicio. El destino de este dinero se reparte entre dos actuaciones. Por un lado, las obras necesarias para la reconstrucción del muro de la calle Anttottipi (en Zaisa 3) tras el desprendimiento de la ladera que sustentaba, el pasado mes de enero. Por otro, el pago correspondiente al primer plazo para la construcción del equipamiento público de Palmera-Montero.

Oinatz Mitxelena (Bildu) mostró su «satisfacción porque el Ayuntamiento tenga esa disponibilidad económica», pero también indicó que «nos hubiera gustado que se destinara a responder a las necesidades de los ciudadanos: ayudas especiales, a los desempleados...». Por parte de EAJ-PNV, fue José Enrique Corchón quien explicó la postura del grupo, contrariado porque «nuevamente, no se nos ha consultado nada. Suponemos que el Gobierno lo habrá hablado con otros, con el PP seguramente...» Criticó que «de los 5,4 millones de los que el delegado habló cuando dio cuenta de la liquidación del año, la realidad eran 4,4 porque otro millón correspondía a la paga extra no abonada y no está disponible. Y de eso, proponen el uso de 1,6». Recordó que en el Pleno de preuspuestos el Gobierno dijo que «hablaríamos de qué hacer con el remanente, pero a este paso... De momento, esta vez ni han hablado con nosotros, ni nos han consultado prioridades».

El delegado de Hacienda, Miguel Ángel Páez, le respondió que ambas actuaciones son necesarias. En el presupuesto de 2013 había inversiones plurianuales, algunas indefinidas en las aportaciones para cada ejercicio, como la del centro cívico. Todos sabíamos que había un contrato con la empresa adjudicataria con unos compromisos para este Ayuntamiento. Lo que se ha ido concretando después son los ritmos. Y si una ladera se viene abajo por las lluvias... Ante un incidente como ése es obvio que hay que reaccionar y, afortunadamente, tenemos capacidad para hacerlo», señaló. «Por eso, no creo que ninguna de estas dos cuestiones deba ser una sorpresa para nadie».

Juana de Bengoechea, portavoz del Grupo Popular al que había aludido Corchón como aquel con el que el Gobierno habría negociado la modificación de créditos, le aseguró al edil jeltzale que «tampoco hemos hablado mucho» y dejó caer que «lo que sí hemos hecho ha sido preguntar». Coincidió con el delegado en la «necesidad» de estas aportaciones y, en concreto, sobre el muro de Zaisa, añadió que espera que «entremos en un litigio para ver si hay otros a los que les corresponde una parte de esta actuación. Pero está claro que para que no se siga dañanado la actividad económica de la zona, este Ayuntamiento tiene que actúar y hacerlo con diligencia». Añadió que sí coincidía con el PNV en que «cuando se cierre exactamente el remanente disponible, tendremos que discutir entre todos sobre lo que hay que hacer con él».