12 abril 201608:08
«Cuando me diagnosticaron la enfermedad de Parkinson, al principio no lo aceptaba pero luego, poco a poco, como no tenía otro remedio y gracias a la asociación, pude salir adelante». Teresa Rodríguez es una de los cerca de 1.600 guipuzcoanos que hacen frente a esta enfermedad, una lucha en la que desde el año 2000 cuentan con el apoyo de la Asociación de Parkinson de Gipuzkoa (Aspargi). Pero la labor de esta organización va un paso más allá, ya que año tras año organizan diferentes actos para recaudar fondos destinados a investigar el Parkinson. «'Sin investigación no hay curación' es nuestro lema», sentencia su presidente, Carmen Olazabal.
LOS DATOS
Objetivo. Recaudar fondos para la investigación de la enfermedad del Parkinson.
Lugar. En el cubo pequeño del Kursaal de Donostia, mañana a las 20.00 horas.
Entrada. 19 euros.
Aspargi. Lleva 16 años dando información y apoyo a afectados por la enfermedad. Más información en www.aspargi.org.
Con esa máxima en mente este año han pensado a lo grande y han organizado la primera gala benéfico para recaudar dinero, un acto que tendrá lugar mañana en el cubo pequeño del Kursaal de Donostia a las 20.00 horas. La cita fue presentada ayer por Olazabal en el centro social de mayores de Luis Mariano, donde estuvo acompañada por el delegado de Bienestar Social, Sergio Corchón, y Rodríguez, vicepresidenta de Aspargi.
La presentación del acto benéfico correrá a cargo de los actores Olatz Beobide y Asier Hernández, quienes darán paso a los diferentes bloques en los que está divididad la gala. Por un lado, los asistentes podrán disfrutar de un concierto a cargo de la Orquesta Bisutería y dirigido por el músico Pascal Gaigne. Por otro, el neurólogo y colaborador de Aspargi Gurutz Linazasoro impartirá una breve charla titulada 'La situación de la investigación biomédica de la enfermedad del Parkinson en Gipuzkoa. Además, antes de la actuación musical se entregará el premio anual de la asociación.
La entrada cuesta 19 euros y la recaudación íntegra irá destinada a financiar uno de los proyectos de investigación que le sean propuesto a Aspargi. El año pasado fueron seis las iniciativas y fue decisión de «un jurado aséptico y profesional» el nombrar al ganador, que en ese caso fue la propuesta elaborada por Nanogune y Biomed.
Olazabal explicó que cuando una persona es diagnosticada «surgen muchas dudas», por eso ellos están ahí para que «cualquiera nos pueda llamar para tener más información o recibir apoyo, es gratis». Aceptar que se padece Parkinson no es fácil. «Lo primero es digerir el diagnóstico. Después hay que hacer el tratamiento, que es cada vez más personalizado, pero también muchas otras cosas, como acudir a centros como el que tenemos en Irun para estar con gente que piensa como tú y que te va a entender perfectamente».
El Parkinson es una enfermedad «que nadie está libre de padecer», aseguró el delegado de Bienestar Social. En ese sentido, Corchón explicó que a él también le ha tocado de cerca: «El pasado jueves me encontré con una persona que es un referente profesional para mí. Me dijo que le habían diagnósticado Parkinson».
Sacar fuerzas de donde sea
Del beneficio que supone contar con el respaldo de Aspargi da buena cuenta su vicepresidenta, afectada de Parkinson. La asociación le ayudó a pasar de la negación absoluta a aceptar la situación. «Para mí Aspargi ha sido y es muy importante». Ser diagnosticado no se limita al jarro de agua fría inicial, «luego con el tiempo, cuando una va empeorando lo lleva todavía peor», explica Rodríguez, que hace hincapié en que «hay que sacar fuerzas de donde sea porque hay que vivir el día a día. Hay que pasarlo así». Esa vitalidad y empeño la consigue «con ayuda de la familia y amigos, que siempre está bien».
En su opinión, es «muy importante» que siga la investigación, no sólo por encontrar una cura, que espera que «un día llegue», sino porque si por el momento no la hay «por lo menos que vayan sacando cositas para mejorar la calidad de vida de las personas». En ese sentido, Rodríguez se muestra «contenta» estos últimos días porque ha empezado a tomar «una nueva medicación que ha salido ahora y me encuentro bastante mejor, pero todavía con un poquito de reservas». Por eso, confía en que la investigación que realicen gracias a los fondos obtenidos en la gala benéfica de mañana en el Kursaal «sirva para muchas otras personas, porque hay que seguir investigando».
Teresa Rodríguez, Sergio Corchón y Carmen Olazabal ayer durante la presentación de la gala.