El contenido del nuevo Perco fue expuesto ayer en el Ayuntamiento ante medio centenar de comerciantes locales y con la presencia de la asociación de Comercio y Hostelería de Irun, Mugan.

Ayuntamiento y establecimientos vienen colaborando activamente en las distintas fases de las que ha constado el desarrollo del nuevo Perco. La cita de ayer cerraba toda una fase de preparativos para abrir ya la de las acciones concretas. Porque el objetivo es que a partir del mes de septiembre puedan empezar a ponerse en marcha los primeros de esos 'proyectos' que contempla el Perco y una de las actividades pioneras podría estar relacionada con la conmemoración del 150 aniversario de la llegada del tren a la ciudad en la que los comercios se adscriban a ese 'grupo de afinidad' podrían tener ya un papel de especial relevancia. En cualquier caso, tanto el alcalde, José Antonio Santano, como el delegado de Promoción Económica, Miguel Ángel Páez, animaron a los propios comerciantes a trabajar sobre lo presentado para a la vuelta del periodo estival hacer propuestas y sugerencias que sirvan para mejorar el plan tal y como está concebido ahora. Eso además de valorar en cuáles de los proyectos de los apuntadosd querrían participar o qué otros podrían ponerse en marcha.

El nuevo Plan de Revitalización Comercial (Perco) está planteando todo un cambio de perspectiva en el diseño de la colaboración público privada para impulsar el comercio local, actividad que, cada vez más, pone a Irun en el mapa y que se ha convertido en una de sus potencialidades principales.

El desarrollo alcanzado en el comercio local ha colmatado lo previsto en los Percos anteriores. Pero el nuevo plan plantea nuevos retos, nuevos conceptos y quiere ser mucho más ambicioso. El posicionamiento, la colaboración, la comunicación, el cliente francés... siguen siendo piezas fundamentales del puzzle comercial local, pero Ikei, la empresa que ha participado en la redacción del Perco, ha añadido más ingredientes.

El mapa comercial actual (www.irun.org/turismo/rutas_comerciales.asp) distribuye las zonas comerciales en manchas sobre el plano de la ciudad. El nuevo Perco cambia ese plantamiento «para llegar a cada tienda de cada calle», partiendo de una línea que une Ventas (Centro Comercial Txingudi) con Behobia, de la que nacen «como flores autóctonas de Plaiaundi», hasta ocho enclaves comerciales, cada uno con su carácter y sus especificidades. Usar flores de Plaiaundi, no es casualidad. Es porque los redactores del Perco ven el parque ecológico un ejemplo de lo que debiera ser el comercio en la ciudad: un espacio rico y variado, autóctono y natural, que convive con otros elementos como las vias y sus infraestructuras o un centro de enseñanza.

Porque de eso se trata. «Hay que crear atractivos alrededor del comercio. Porque la gente que viene a Irun, no viene sólo a comprar. Le gusta pasear, le gusta el ocio. Y además compra. Cuanta más gente traigamos a la ciudad por el motivo que sea, más posibilidades de que compren». Hay que agasajar al visitante, y sorprenderlo. Y para eso, a veces hay que organizar actividades, desarrollar 'proyectos'. Otras veces, sólo descubrirles lo que ya existe, «como un paseo por la zona rural de Ventas, o los merenderos que ya hay en la ciudad», citan los redactores del nuevo plan.

Cuando el Perco habla de 'proyectos', habla de algo bastante concreto. Es «una idea que agrupa a varios comerciantes que se ponen de acuerdo para identificarse ante la ciudadanía, en un periodo determinado y que comparten un protocolo para presentarse y visualizarse». Varios de esos 'proyectos' ya han empezado a definirse: uno vinculado al ferrocarril podría estrenarse este mismo año con la efeméride del 150 aniversario; otro relacionado con el Camino de Santiago; varias ideas en torno a la playa, el Topo, Oiasso, Ficoba... Los comercios 'ofrecerán' y dinamizarán porque detrás se esconde la premisa principal antes mencionada: sorprender al visitante, hacerle sentir a gusto y que se vaya con deseos de volver.

Aunque se hable tanto del visitante, el Perco no se olvida del consumidor local. El diagnóstico realizado ha determinado que los irundarras realizan fuera de Irun el 12% de su gasto potencial. No es mal dato. También se ha estudiado el gasto que se hace en el barrio respecto a otros de la ciudad. Y también, cómo no, el impacto de nuestros vecinos norteños. Centenares de personas de Hendaia vienen a Irun cada día. No es de extrañar, pues la mayoría de ellas 'son' de Irun. Como su principal referencia de compras, está el Centro Comercial Mendibil, incluido su mercado de frescos.

Los datos desde más al norte resultan llamativos. Desde el BAB (Biarritz-Anglet-Baiona) muchos vecinos franceses se acercan hasta Irun con una frecuencia de dos visitas mensuales. «Son un cliente numeroso y fiel», dicen los investigadores del Perco. Y todos vienen en coche, por lo que el diagnóstico incide en la importancia de hacerles 'descubrir' el parking de San Juan como una de las claves para que conozcan la ciudad y disfruten de ella. Porque lo cierto es que desde esa zona del BAB hay 2,3 visitas al año que paran en las zonas fronterizas de Santiago y Behobia y desde allí van directamente el Centro Comercial Txingudi.