El alcalde, José Antonio Santano, afirmó ayer que los municipios de Gipuzkoa «podemos tener un problema» en referencia a las discusiones sobre el reparto de los ingresos de la Diputación foral.
Santano explicó que «como consecuencia de la actualización de balances, la Diputación de Gipuzkoa debería aportar 24 millones de euros al fondo común de las diputaciones y el Gobierno, 24 millones que no ha recaudado». Esta circunstancia, «en la práctica, puede suponer un perjuicio para los ayuntamientos de Gipuzkoa, que podrían ver disminuida de manera importante la aportación que corresponde al año pasado». En el caso de Irun, según concretó el alcalde, «estaríamos hablando de una reducción de más de 700.000 euros». La cantidad adjudicada inicialmente al consistorio irundarra ascendía a «unos 34 millones de euros», por lo que la citada disminución sería de aproximadamente un 2% del total.
El alcalde quiso «llamar la atención» sobre esta cuestión porque «este es el momento para que todo el mundo sea consciente de que el perjuicio que se causa, pasado el año en que se debía ejercer el presupuesto, es importante». Un perjuicio que afectaría principalmente «a los ayuntamientos, que estamos haciendo un gran esfuerzo por ajustar nuestras cuentas y atender, fundamentalmente, los objetivos sociales y de empleo».
Si los malos pronósticos se cumplieran, «supondría que en las entregas que se hacen a cuenta del Fofim», el Fondo foral de financiación municipal, «se produciría una disminución. Es decir, los presupuestos ya se han hecho con unas cantidades y esas cantidades se verían reducidas». En opinión de José Antonio Santano, «quizá lo más doloroso es que es una reducción sobrevenida. Es decir, ya se habían hecho los números, se había aprobado la preliquidación, el presupuesto de 2014... Y ahora nos surge este asunto».
Asunto que, según señaló el alcalde, «debe obligar un poco a que el Gobierno Vasco haga el papel de moderador, de equilibrio dentro de los territorios. Si no, nos podemos encontrar con que la sociedad guipuzcoana va a perder dinero y recursos, y sin haberlos recaudado. Porque», continuó Santano, «una cosa es pagar el porcentaje que te toque habiéndolo recaudado, y otra cosa es que te toque pagar una cantidad sobre un ingreso que no se ha producido. En este caso, tenemos que hacer causa común porque nos estamos jugando una forma de funcionar y de repartir los ingresos».
«Hay que hacer piña»
No obstante, el alcalde mostró su confianza «en que el acuerdo de los partidos políticos de Gipuzkoa sea un punto de apoyo. No perder ese dinero es un objetivo que nos interesa a todos los ciudadanos de la provincia y, por supuesto, a todos los ciudadanos de Irun».
Según afirmó el alcalde, perder esa cuantía económica «supondría una aminoración presupuestaria importante, y por lo tanto, un daño económico». Santano aseguró, «a parte de otras consideraciones sobre cómo se establecen los criterios de reparto», que «aquí hay que hacer piña, hay que sumar esfuerzos porque si no Gipuzkoa, y muy especialmente los ayuntamientos, van a salir perjudicados».
