El Ayuntamiento de Irun ha autorizado la contratación de los trabajos necesarios para elaborar un plan para la gestión del arbolado de la ciudad. El objeto del estudio es «el análisis, evaluación y valoración de la situación de los árboles que existen en el casco urbano para su correcto mantenimiento y atender los cuidados que puedan requerir».
Este documento deberá definir las medidas correctoras a corto, medio y largo plazo que deberán aplicarse sobre el arbolado que genera o pueda generar en un futuro molestias a la población, así como las recomendaciones, actuaciones de mejora y protocolos de mantenimiento necesario. «La idea es tener a mano una visión integral sobre el arbolado de la ciudad que se apoye en el trabajo que ya realiza el servicio de parques y jardines para mantener nuestros árboles con las mejores garantías posibles», explicaba la delegada de Vía Pública, Cristina Laborda. «Pensamos que, de esta manera, conseguiremos dar respuesta a diferentes cuestiones que nos trasladan los vecinos».
El trabajo se desarrollará en tres fases. La primera será la fase de recopilación de datos. A través de un plano de la ciudad, datos ya existentes sobre la ubicación de unos 14.000 árboles y del registro de observaciones trasladadas por los ciudadanos durante los últimos años, se revisará y actualizará la situación a día de hoy.
La segunda fase será la de de análisis y diagnóstico. Tras realizar la recopilación y verificación de la información de partida, en esta segunda fase se llevará a cabo un análisis de la situación del arbolado, clasificándolo en diferentes unidades de gestión. Asimismo, se hará un primer diagnóstico de la situación del arbolado, que tendrá como objetivo definir focos prioritarios de actuación e indicar también el arbolado que pueda tener un riesgo para la población.
Actuaciones y presupuesto
La terecra fase será la de estrategia de mantenimiento. En ella se contemplarán las diferentes actuaciones a acometer para la mejora y mantenimiento del arbolado de la ciudad, teniendo en cuenta las prioridades detectadas, la periodicidad necesaria, la posibilidad de actuar y la consecuencia de acciones que contemplen la uniformidad y homogeneidad de las zonas para aprovechar al máximo los recursos disponibles.
El presupuesto para la realización de este estudio es de 25.000 euros y está previsto que su redacción se prolongue durante seis meses. «Con este estudio estaremos mejor preparados para resolver los problemas que sobre este asunto nos plantea la ciudadanía, situaciones en ocasiones delicadas que afectan a su día a día. Igualmente, este trabajo estará enfocado en la búsqueda de una ciudad con un arbolado más sostenible, cuidando estos ejemplares y evitando y minimizando las posibles molestias que puedan ocasionar a los vecinos», añadió la Cristina Laborda.
