IRUN- La orquesta sinfónica Taupadak, que toma el nombre de la ONG irunesa que trabaja en la Amazonía boliviana, volverá a reunirse este próximo domingo, a partir de las 19.00 horas en el auditorio del centro cultural Amaia, para ofrecer un concierto que recaudará fondos destinados a la Escuela de Música de San Ignacio de Moxos, en el departamento boliviano del Beni.
Según explica el presidente de la ONG Taupadak, Fernando de la Hera, se trata de “la séptima ocasión en que este grupo de músicos, todos ellos profesionales vinculados con Irun y la comarca”, se reúnan para ofrecer su música y conseguir fondos para la escuela de San Ignacio de Moxos, que es quizá el proyecto más emblemático de esta organización dedicada a la cooperación.
En esta nueva cita, el domingo en el Amaia, serán alrededor de 70 músicos los que se suban al escenario, dirigidos por Iker Sánchez y con la actuación como solista de la mezzosoprano Leticia Vergara. En el programa habrá obras para orquesta de compositores como Rossini, Mascagni o Strauss, y piezas para orquesta y voz solista de Xavier Monsalvatge y Georges Bizet.
Las entradas para este concierto están ya a la venta, al precio de 10 euros, en la oficina de turismo de Irun y y también en Internet, a través de Kutxabank.
APORTACIÓN IMPORTANTEDe la Hera destaca que esta cita anual supone “un importante aporte económico” para mantener la emblemática escuela cuya gestión encabeza Taupadak desde hace trece años.
Allí estudian ahora mismo “230 alumnos de etnia indígena” y de allí salió también el Ensamble de Moxos, el conjunto de música barroca que es ya una referencia internacional y que cada dos años acostumbra a realizar intensas giras por Europa, incluyendo entre sus paradas, siempre, una cita en Irun, su segunda casa.
Giras que realizan cada vez que graban un nuevo disco y que son “fundamentales para el sostenimiento de la propia Escuela de Música de San Ignacio”.
A este respecto, el presidente de Taupadak explica también que “habrá gira del Ensemble de Moxos en este nuevo año 2018, si bien en realidad, tenían que haber venido de gira en 2017, pero con algunos de los músicos que a día de hoy ya son padres y demás, no es fácil que puedan dejar Bolivia durante tres meses, que es lo que les permite estar por Europa el visado de turista”.
20 AÑOSAdemás, la ONG Taupadak cumplió en el recién finalizado 2017 sus 20 primeros años de vida, una trayectoria de la que Fernando de la Hera hace “una valoración positiva”.
Recuerda el dirigente de esta entidad dedicada a la cooperación que empezaron hace dos décadas “de la nada, montando un barco que recorría el río y pasaba por las comunidades indígenas para pelar el arroz”.
Desde entonces, Taupadak “ha crecido de forma exponencial, siempre de la mano de personas voluntarias que trabajan de forma altruista”, llegando a tener proyectos de mucho peso, financiados mediante subvención o convenios con instituciones como el Ayuntamiento de Irun y muchos otros más, la Diputación Foral de Gipuzkoa o el Gobierno Vasco.
En los dos últimos años, Taupadak se ha empeñado en llevar su ayuda a las comunidades de la etnia indígena chimán, que pueblan las orillas del río Maniqui y que son “uno de los entornos más inaccesibles de todo el departamento boliviano del Beni”.
Están “muy satisfechos con el proyecto de construcción de pozos de agua emprendido con los chimanes” y “dispuestos a seguir trabajando con ellos”, concluye Fernando de la Hera.
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