“Mujer tenías que ser”, “qué guapa eres”, “¿ya sabes llevar tú un autobús tan grande?” o “¿vamos seguros con una mujer al volante?” son algunas de las frases que han tenido que aguantar durante años las conductoras de transporte público, una profesión que hasta hace veinte años era un mundo reservado solo a los hombres.

“Aún hay gente que duda de la conducción de la mujer. A mí alguna vez me han preguntado si van a ir seguros con una mujer al volante, a lo que he reaccionado diciendo que esperen al siguiente a ver si tienen suerte y es un hombre, cerrándoles la puerta”, cuenta Arantxa Telletxea, de Ekialdebus. Telletxea y otras cinco conductoras de Lurraldebus han contado hoy sus experiencias al volante en la presentación de la campaña de movilidad que ha puesto en marcha la Diputación de Gipuzkoa y que tendrá, precisamente, como protagonistas, a siete mujeres que conducen autobuses de servicio foral de transporte público interurbano.

El 60% de las personas que utilizan Lurraldebus son mujeres, pero solo un 17% de los trabajadores son conductoras. “Es evidente que las desigualdades en este sector están muy a la vista e incluso hay gente a la que todavía se le hace raro encontrarse con conductoras”, explicó la diputada Foral de Movilidad y Ordenación del Territorio, Rafaela Romero; , que presentó la campaña en el Museo Oiasso de Irun junto al alcalde de la ciudad, José Antonio Santano.

Veteranas de la conducción como Maixa Lekuona, de Euskotren; Leire Billelabeitia, de TBH Buruntzaldea; Begoña González, de Bilman Bus, y Amaia Expósito, de Autobuses La Guipuzcoana, han confesado que son felices con lo que hacen, pero que en sus inicios tuvieron que pasar por situaciones “muy injustas”, escuchar comentarios muy machistas o incluso que en algunas empresas no les contrataran por el hecho de ser mujeres.

Cada vez es más común ver a las mujeres a los mandos del transporte público. María José Arza, conductora de Avanza, ha recordado que fue la primera mujer de la empresa y que tuvo una acogida muy buena por parte de todos sus compañeros, que le ayudaron y le enseñaron mucho. Un compañerismo al que también se ha referido Billelabeitia: “Los días de fiestas en los turnos nocturnos son los más peligrosos porque no dejamos de estar solas, pero, en mi caso, mis compañeros de otros autobuses están todo el rato pendientes de mí y ofreciéndome su ayuda en cualquier momento, algo que agradezco muchísimo”.

También se han abordado temas para la mejora de los servicios como la implantación de cámaras de videovigilancia en el interior de los autobuses de Lurraldebus para la disminución de incidencias en los servicios nocturnos. “Yo, personalmente, sí me siento más segura yendo con cámaras dentro del autobús”, ha señalado Amaia Expósito. Las conductoras han aprovechado la ocasión para compartir sus peticiones con la diputada de Movilidad. Entre otras solicitudes, han pedido un baño para los conductores que hacen turnos nocturnos ya que los baños públicos suelen estar cerrados y también han solicitado mejoras en la accesibilidad de algunas paradas. Como recuerdo del acto, las conductoras han recibido un autobús en miniatura de Irizar de color morado, en representación a la mujer.