IRUN. La Junta de Gobierno Local de Irun ha aprobado esta semana el proyecto técnico para sustituir las lámparas de vapor de sodio de las farolas de la urbanización de Ribera, en Larreaundi, y del Poblado de Urdanibia, por otras nuevas de bajo consumo.
El proyecto prevé la actuación sobre un total de 123 farolas de ambos entornos, tiene un presupuesto máximo de 67.397 euros y su objetivo es, según destacó este jueves el alcalde, José Antonio Santano, "que la iluminación de estas dos zonas sea más eficiente, propiciando una disminución de la contaminación lumínica y propiciar también un ahorro en el consumo eléctrico, que se traducirá también en un menor importe de las facturas eléctricas".
CALLES AFECTADAS Las vías afectadas por esta renovación y sustitución de lámparas abarcan, en la zona de Ribera, además de la calle del mismo nombre y su parte trasera, las calles Txikillo, Maiatzaren Lehena y parte de San José Obrero, mientras que en el Poblado de Urdanibia se actuará sobre las farolas de las zonas peatonales interiores y en las calles Errotaundi Ibilbidea, Tonpes y parte de la calle Bolueta.
Según han explicado desde el Consistorio, las 123 farolas ubicadas en todas estas zonas disponen de globos de vidrio prismatizado con lámparas de vapor de sodio de 150 watios de potencia, una tecnología ya antigua y poco eficiente, tanto en capacidad como en consumo.
El proyecto de renovación comprende sustituir estas lámparas por otras de 50, 70 y 100 watios de potencia y que tienen un rendimiento superior al 65%, de forma que producirán una contaminación lumínica menor y mejorarán la eficiencia energética.
Según detalló el alcalde, en este caso de Ribera y el Poblado de Urdanibia, "el ahorro previsto con esta actuación alcanzaría los 43.512 kilowatios al año, o lo que es lo mismo, un equivalente en consumo de factura eléctrica de 5.718 euros anuales".
UN NUEVO PASO Santano enmarcó esta actuación en Ribera y Poblado de Urdanibia, que tendrá un plazo de tres meses para la ejecución de los trabajos, como "un paso más dentro de las medidas que venimos adoptando desde el Ayuntamiento para mejorar la eficiencia energética y ambiental de nuestro alumbrado y de paso, poder tener un ahorro económico".
En concreto, el primer edil señaló que "esta sustitución de luminarias no es la primera que se acomete en Irun ni mucho menos, ya que desde 2009 hemos procedido a la sustitución de lámparas antiguas por otras más eficientes en 854 farolas de toda la ciudad".
Estas actuaciones suponen un ahorro anual de 317.351 kilowatios de consumo eléctrico, que se traducen en un importe económico que supera los 30.000 euros anuales. Santano aclaró que "el ahorro en consumo es equivalente al 5% de lo que supone la factura electríca anual, de unos 6,5 millones de kilowatios, pero en lo económico no siempre la equivalencia es la misma, dado que, por desgracia, las tarifas de electricidad están subiendo de forma constante".
El alcalde de Irun recordó que la ciudad está adscrita al Pacto de Alcaldes para la Sostenibilidad Energética, que contempla, para 2020, el compromiso de reducir un 20% las emisiones de CO2, aumentar en un 20% el uso de energías renovables y en otro 20%, la eficiencia energética
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